domingo, 3 de julio de 2011

Entre el Arte y el Diseño

A partir de una cita colgada en Facebook por mi amigo Francisco del Campo, de profesión diseñador gráfico, de John Maeda (artista, diseñador gráfico y escritor), se estableció un intercambio dialéctico. El tema entre el ARTE y el DISEÑO, dió para mucho.

La cita: "Mientras el arte con mayúsculas nos incita a cuestionarnos, el diseño con mayúsculas aclara las cosas."

Desde´l Cuore: Y a veces ofrece un entretenimiento con mayúsculas ¿???

Francisco del Campo: Si te refieres al entretenimiento como forma de alienación, no conviene identificar el diseño con la publicidad que se sirve de muchas otras disciplinas para lograr sus fines. El diseño es una industria inserta en este sistema como lo estaría en cualquier otro, que implica prácticas más o menos estructuradas que sirven a la resolución de problemas más allá del ámbito de su actividad productiva.

Desde'l Cuore: Suena bien lo que dices y me merece el mayor respeto. Pero cuando el diseño no se usa para satisfacer a la necesidad, sirve para satisfacer al confort. Los publicistas se encargan de transformar confort en necesidad. Y el diseñador luego resuelve la nueva supuesta necesidad. A su vez en este proceso, el diseño transforma al arte en una mera solución estética, acabando así con todo el cuestionamiento que el arte ofrecía inicialmente. Es similar a la diferencia entre un jardín y un bosque virgen. "El Diseño aclara las cosas"

Francisco del Campo: Desde el punto de vista de la función, el diseño resuelve necesidades, aunque sea la necesidad de una empresa de vender tabaco, la necesidad de un político corrupto de ganar las elecciones o la necesidad de un fabricante de producir armas más eficaces. El diseño es un servicio y no es bueno ni malo en sí mismo, pero si podemos valorar el fin al que sirve en cada caso. Personalmente diseño encantado para una ONG y no lo haría para un fabricante de armas, pero no todo el mundo puede elegir siempre a quien servir. Y entre la asociación de discapacitados y el político mafioso hay una gradación infinita.
Maeda escribe esto en sentido absolutamente positivo en su libro "Las leyes de la simplicidad", muy recomendable por cierto. Y en el contexto que lo dice viene a significar que, si bien el arte es para el crecimiento interior de las personas, el diseño es para facilitarnos la vida.

Desde'l Cuore: Estoy de acuerdo contigo, pero ¿necesidad no es otra cosa? Vender tabaco, o hacer política no es "facilitar la vida", es la búsqueda del mayor beneficio sin atender a ninguna otra dirección o consecuencia. Esto está relacionado con el aspecto manipulador de la publicidad y con el diseño a su servicio. La publicidad tiene una parte divulgativa, y otra que intenta tocar la emoción o el lado" irracional" del cliente (marketing).
El uso manipulador de la publicidad es el método para suplantar confort en necesidad. ¿Eso sería según John Maeda diseño con minúsculas o con mayúsculas? EL DISEÑO, ¿En cuales campos opera? ¿DISEÑO y diseño sólo se diferencian en la habilidad y el éxito del diseñador/a? Teniendo en cuenta que los diseñadores son personas con un sinfín de complejidades y sin ningún ánimo de entrar en juicios morales ¿Los/as diseñadores que no pueden elegir otra alternativa, a qué se debe? ¿A la de falta pensamiento moral, o a su falta de visión de otras alternativas posibles? ¿Si es su falta de visión de otras alternativas posibles esto implica que se trata de un DISEÑADOR o un diseñador? Si no te aburres y no consideras estas cuestiones fuera de tu campo o interés sería un honor seguir cuestionando la frase de John Maeda. Gracias por tu atención.

Francisco del Campo: Bueno, publicidad y marketing no son la misma cosa. Marketing es también y por ejemplo, hacer más grande el agujero del envase para que gastes más y así compres más, por encima de cualquier otra consideración. ¡Ah, vaya!, seguro que hubo un diseñador que tuvo que ajustar el diseño del envase para que así fuese! ¿Debería el diseñador haber objetado?... no seré yo quien lo juzgue públicamente.
Pero igualmente eso no es diseño, sino marketing, ya que un buen diseñador buscaría hacer el envase más económico, ecológico, informativo, fácil de usar, de transportar, de reutilizar y de eliminar, y además lo haría bonito porque está demostrado que las cosas bellas funcionan mejor, y se preocuparía por el proceso de producción, por su economía e impacto ambiental, y de su comercialización, de si se verá bien y se diferenciará de otros productos, si se asociará con su uso aún sin leer la etiqueta, se ocupará de que no se confunda con otros productos para evitar accidentes, etc, etc, etc.
¡Si es que podemos decir lo mismo de cualquier actividad humana!  Por ejemplo, si hablamos de la política como la actividad del que se ocupa de las cosas del gobierno y negocios del Estado y de regir los asuntos públicos, ¿podremos decir que la política es corrupción y, por tanto queremos abolirla, o por el contrario la entenderemos como una realidad necesaria para la vida en sociedad y querremos que se practique de acuerdo al bien común, reconociendo que hay POLÍTICOS y políticos?
Yo creo que en realidad estamos hablando del sistema que, dominado por el mercado, busca el crecimiento ilimitado por encima de cualquier otro valor. Hablamos de la ambición y la codicia humanas, capaces de corromperlo todo: el diseño, la publicidad, la política, la fontanería o el arte.
Hay prácticas buenas y malas (aunque habría que convenir un marco ético para emitir un juicio moral) y hay personas que eligen (o se ven abocadas a) unas u otras prácticas. Hay quien engaña y manipula con su práctica de la publicidad, de la política, del comercio... y quien no lo hace. Hay quien diseña para los primeros y otros para los segundos, pero la mayoría diseñamos para quien nos paga y a veces para quien no nos paga, siempre que no entre en conflicto con nuestros valores.
MIs valores son el amor y la justicia, entre otros, pero conozco quien tiene por suyos la codicia, el poder. Ambos tenemos la misma formación y similar experiencia, usamos las mismas herramientas y trabajamos para clientes similares. ¿Cuál de los dos condescenderá con la injusticia para obtener un beneficio? ¿Se podrá decir que uno es DISEÑADOR y el otro diseñador?

Desde'l Cuore: De cierta manera estamos hablando del sistema aunque en mi caso no de la idea de sistema como algo sólo exterior al ser humano, sino que parto de que el sistema no es la máquina sino la percepción individual y colectiva que la diseña, la crea y la sostiene. Tampoco es mi interés enjuiciar a nadie o usar términos como bueno o malo. La frase de John Maeda (un hombre con un gran talento por cierto) "el diseño con mayúsculas aclara las cosas" ofrece mucho juego. A partir de los interrogantes que plantee, trato de llamar la atención sobre algo que se ha vuelto tan normal que no le prestamos atención. Publicidad, marketing, diseño y otras áreas profesionales están "diseñando" necesidades, no respondiendo a ellas. Maeda en uno de sus videos comenta que se sienta a dialogar con otros profesionales en las "Glass House Conversations" entre otras cosas sobre "¿Qué significa ser humano hoy en día? No me resulta particularmente relevante las respuestas que ofrecen al respecto, pero si la pregunta. Esta lanzada a cada cliente "¿Qué significa ser humano para usted?", no como ejercicio intelectual sino como ejercicio auto perceptivo e integrador, puede llevar a la siguiente pregunta: "¿Cuáles son sus necesidades?". ¡Por otro lado hay millares o más de hombres y mujeres diseñando necesidades, sin conocer las propias y sin atreverse a diseñar sus propias alternativas para satisfacerlas!

Francisco del Campo: Muy cierto. Yo creo que esto tiene que ver con el dominio que el mercado está imponiendo sobre la sociedad civil usurpando ya no sólo las cuestiones públicas, sino la identidad misma de las personas.
Y estoy de acuerdo con que la primera responsabilidad es la que cada uno tiene sobre su propia vida, pero tampoco podemos caer en la ingenuidad de que cualquiera puede hacer con su vida lo que quiere. Para que una persona pueda desarrollarse en libertad necesita unos recursos, que no son los que proporciona la educación como la tenemos planteada, y remar desde la más tierna infancia en contra de un fuerte influjo consumista y egoísta al que se verá permanentemente sometido.
Cierto es también que la publicidad es una de las herramientas más eficaces en manos del mercado para ejercer esta influencia.

Desde'l Cuore: La libertad tomada como la oportunidad de tener mayor número de opciones, es una manera un tanto limitada de ver la libertad. Las opciones se diseñan, las egoístas y las que no. Pero desde dónde se diseñan es lo que marca la diferencia. No soy más libre por tener más opciones, soy libre cuando parto de lo que soy para encontrar opciones. Es en la mente de una persona libre dónde el diseño puede "aclarar las cosas", no en la mente (talentosa o no) de los que crean opciones para necesidades irreales, pensando que no tienen otra opción, dirigidas a personas que también piensan lo mismo. "Hacer con la vida lo que uno quiere" no es solamente una ingenuidad, es un fatal error de juicio. Pero si la libertad dependiera de las opciones, estaríamos en una libertad de mercado, sujetos a las leyes de la oferta y la demanda. Libertad es el impulso a tomar responsabilidad sobre quién soy, sobre lo que siento, y por todo lo que me rodea, y el impulso a dejarme guiar por ello. Aunque algunas veces no haya aparentemente ninguna opción y eso... Despiste un poco y a veces duela…

Francisco del Campo es diseñador gráfico y diseñador de interiores. http://www.warnon.es/