martes, 18 de junio de 2013

Burbujas de Realidad Aumentada

En la Realidad ¿Qué informa de su Magnitud?
¿Cuál es la magnitud de lo magnífico?
De un viaje que no se detiene surge el tiempo.
Destenerse es un no tiempo. Aunque todo siga...
Si me muevo con la vida.
¡La vida se mueve conmigo!
¡Tiempo Expandido!
Soy Conciencia, bruma, delicia, Eros y caricia.
¿Una Realidad Aumentada?
La eternidad es el paladar de un instante.
Tiempo Espiral. Tiempo Conjunto.
Información que me forma.
Información que me Reforma...
¡Información que me desforma!
IMAGINACIÓN
¡¡¡LA QUE TRANSFORMA!!!

Somos la especie más inteligente del planeta??????


miércoles, 27 de febrero de 2013

El juego de la muerte


Los aspectos legales y filosóficos de la obediencia son de enorme importancia, pero dicen muy poco sobre cómo la mayoría de la gente se comporta en situaciones concretas. Monté un simple experimento en la Universidad de Yale para probar cuánto dolor infligiría un ciudadano corriente a otra persona, simplemente porque se lo pedían para un experimento científico. La férrea autoridad se impuso a los fuertes imperativos morales de los sujetos (participantes) de lastimar a otros y, con los gritos de las víctimas sonando en los oídos de los sujetos (participantes), la autoridad subyugaba con mayor frecuencia. La extrema buena voluntad de los adultos de aceptar casi cualquier requerimiento ordenado por la autoridad constituye el principal descubrimiento del estudio.
Stanley Milgram. The Perils of Obedience (Los peligros de la obediencia. 1974)
Este documental realizado por el canal plus francés está basado en el experimento de Milgram. En el se desmigan algunos de los subterfugios y peligros que subyacen detrás de lo que creemos es nuestra imagen y hasta dónde somos capaces de llegar en el caso de que esta se vea "amenazada". No se trata de obediencia, no se trata de que seamos malos, se trata de nuestro extremado apego a nuestra imagen, a nuestras creencias y a nuestro entrenamiento social.

El primer examinador es el cruel juez que hemos permitido se instalase en nuestro interior, con sus continuas descargas de sensaciones agradables y desagradables cuando la respuesta es la correcta o incorrecta, según los dictados de nuestra imagen. Nadie quiere parecer tonto, pero a muy poc@s le importa serlo realmente.

Somos parte del juego ¿Cuál es nuestro papel? No se trata de cómo nos comportamos. Se trata de lo que vivimos hacia dentro. No hay respuesta incorrecta, sólo toneladas de expectativas.

miércoles, 23 de enero de 2013

Donde el pollo pía


“Dónde el pollo pía, cerca huele a ..."

Un problema de esf-interes hace que un tufillo rancio impregne la estructura social desde hace largo tiempo. Es como cuando entre un grupo de personas, una se suelta un aire y aún sabiendo que hallar la fuente no impide el olor, alguien pregunta ¿Quién fue? No pretende con esto decir que el resto no tengamos ventosidades pero…
Desde hace tiempo, el perfume no es muy grato entre los seres humanos. Interesante, la respuesta de un conocido lama tibetano (Tai Situ), cuando una persona le hizo la pregunta de qué pensaba que las cosas estuvieran tan mal ahora, a lo que respondió: "no me parece que las cosas ahora estén peor, el sansara siempre estuvo muy mal."
Tan metido en tu mundo, te puedes hacer tanto a la atmósfera pestilente que llegas a no saber de qué se habla cuando alguien dice que huele mal, y a exclamar asombrad@ “Es lo normal”. Si vemos que algo  nos toca o se nos acerca, exclamamos: "Que mal anda todo"...
Pero si la “cosa” te huele mal y quieres saber quiénes defecan sobre qué y quién, hay un terreno resbaladizo en el que se puede indagar, que en internet se le engloba como la "cons-piración"*. ¿De qué va esto?  De escuchar, ver y leer medios independientes (académicos y no académicos) y de aprender a rastrear huellas indelebles en los diferentes medios de información, que permitan crear relaciones plausibles entre el olor y su fuente.
¿Qué valor tiene esto? Si usamos la idea de conspirar, como la acción de planear unos resultados, de manera que los medios y/o los resultados permanezcan ocultos, es fácil ver que todos de una u otra forma jugamos a este juego desde niños. Que básicamente, es una forma bastante común de relacionarnos. Acciones tan simples como regalar flores, elegir un traje o una corbata, una comida, dar un beso, dirigir una mirada ¿Cuántos de estos gestos no son sólo lo que parece?
Acercarnos a este punto en el “que nada es lo que aparenta”, nos da un toque extra de atención, de alerta, un enfoque algo diferente de la realidad. No se trata de caer en la suspicacia gratuita, la desconfianza, la indiferencia o la paranoia. Aunque nada es lo que aparenta, no significa que todo sea una cons-piración potencialmente dañina.
Paradojicamente, acercarse a esos mimbres cons-pirativos puede ser un buen sitio para empezar a conocerse a uno mismo ¿De dónde viene mi comida, mi vestido, los materiales de las casas, mis medicinas? ¿Cuál es la función de la educación, de la política y de la religión que he recibido? ¿De dónde vienen nuestros educadores, políticos y sacerdotes? ¿Para quién trabajan? ¿De dónde viene el dinero? ¿Cuál es su función? Etc, etc. Debido a que mucha de esta información no está visible (No suele venir  Don X a decirte: “Muchach@ la pasta la tengo yo y el marrón es cosa mía). Muchas respuestas quedan sin coherencia si uno no se mancha las suelas en el barro de la cons-piración.
Además, esas y otras muchas preguntas similares nos informan en gran medida del molde en el que encaja nuestro modo de vida, nuestra forma de pensar y de sentir y desde cuáles creencias operamos. Por ello, este puede ser un buen inicio en el auto-conocimiento, ya que este tipo de preguntas, nos llevan a ver nuestro propio condicimiento y nuestra implicación en este juego.
Hay personas que no quieren ver más que sombras y secretos... Siempre hay el riesgo de limitar la visión y creer que todas son películas: "de buenos muy buenos y de malos  muy malos",  "de víctimas y victimarios" o "de inocentes y culpables". Pero en muchas ocasiones no es el caso ¿Cómo usamos la información que recibimos? Si tomamos el recurrente paradigma de la realidad como una cebolla. Cada cual puede seguir “pelándola y pelándola” (Si quiere, claro está). Quitando las apariencias hasta llegar a ver el papel al que está jugando en el teatro de la vida. ¿Hasta qué punto? Uno mismo...

*Uso el término conspiración, aunque ha sido y es desnostado por "griegos y troyanos", debido a que me parece el más preciso y abarcante